Viena, Austria. La Embajada de República Dominicana en Austria, celebró el 175º aniversario de la Independencia con una recepción en Viena, que tuvo como tema central el carnaval dominicano.
A la recepción se dieron cita un nutrido número de miembros del cuerpo diplomático acreditado en Austria y ante los Organismos Internacionales en Viena, funcionarios destacados de los distintos organismos de las Naciones Unidas con sede en Viena, funcionarios del estado, empresarios austríacos, personalidades del mundo cultural y académico, así como miembros de la comunidad dominicana residente en Austria.
El gobierno austríaco estuvo representado por la Directora de Asuntos para las Américas, Embajadora Elisabeth Kehrer y por el Jefe de Protocolo del Ministerio para Europa, Integración y Relaciones Exteriores de Austria, Embajador Enno Drofenik quien en su intervención elogió las relaciones entre ambos países así como los excelentes vínculos comerciales y turísticos.
La Embajadora Lourdes Victoria-Kruse se dirigió a los presentes agradeciéndoles su asistencia y haciendo un breve recorrido por el origen histórico de la República Dominicana. En su discurso, manifestó el actual crecimiento del país en términos económicos y turísticos. De la misma manera resaltó el excelente momento por el que está atravesando nuestra diplomacia en el exterior; como ejemplo de lo cual mencionó el establecimiento de las relaciones diplomáticas con China y que, por primera vez en nuestra historia, se ha obtenido un puesto como miembro no permanente del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas. También resaltó el acuerdo de cooperación firmado recientemente entre la República Dominicana y el Fondo OPEP para el Desarrollo Internacional (OFID) con sede en Viena.
Al finalizar las intervenciones protocolares llegó la sorpresa de la noche con la aparición de los Diablos Cojuelos, que al ritmo de “Baila la calle de noche, baila la calle de día” sorprendieron a los presentes por su ritmo, sus atuendos y sus coloridas máscaras. La recepción estuvo amenizada por la pianista dominicana Elizabeth Michaelis quien estuvo interpretando canciones famosas dominicanas. Nuestra identidad también se puso de manifiesto a través de la gastronomía con la inclusión de platillos típicos criollos en el coctel servido a los invitados. En la recepción se ofreció además, una degustación de ron y chocolates dominicanos
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