Por redaccíon
Santo Domingo, A la espera del dictamen del Ministerio Público para que admita la querella interpuesta contra el rector de la UASD, Iván Grullón, por negación de información pública, está la directiva del Centro de Estudios Socio Económicos de la Juventud.
Esto tras el depósito de la querella formal por negar informaciones referentes a la ejecución presupuestaria, compañías suplidoras, declaraciones juradas de patrimonios de los funcionarios, nómina del personal administrativo y suplidores del comedor universitario y otros aspectos públicos de la Universidad Autónoma de Santo Domingo.
El pasado 8 de mayo el Centro de Estudios Socio Económicos de la Juventud (CESEJU) acudió ante el despacho del Procurador General de la Corte de Apelación del Distrito Nacional, para interponer formal querella en contra del rector de la UASD en el entendido de que en fecha 5 de junio del año pasado, en virtud de lo que establece la Ley 200-04, sobre Libre Acceso a la Información, mediante acto de alguacil, CESEJU requirió de la UASD y de su rector las informaciones.
Al cumplirse los plazos establecidos en la mencionada ley y frente al incumplimiento de las autoridades universitarias en la entrega de la información solicitada, CESEJU sometió ante el Tribunal Superior Administrativo una Acción Constitucional de Amparo por Denegación de Información Pública y Falta de Transparencia en el Manejo de la cosa Pública en contra de la Universidad y su rector.
Mediante sentencia del 4 de diciembre del 2017, la Tercera Sala del TSA, condenó tanto a la Universidad Autónoma de Santo Domingo como al Dr. Iván Grullón Fernández a entregar en un plazo de 30 días la información solicitada.
Por lo que, debido a la negativa de las autoridades de la casa de altos estudios para entregar válidamente la información solicitada, CESEJU ha decidido proceder penalmente en contra del Dr. Iván Grullón Fernández.
El Lic. Domingo Ramírez, director general de la fundación y el Lic. Francis Alcántara, director de Educación y Formación, consideraron como una vergüenza que una institución como la UASD se dedique a atropellar y a ocultar informaciones públicas que deben estar al servicio de la ciudadanía.
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